Con regaños y consejos
guías mi camino.
Con abrazos y besos
me demuestras tu cariño.
Algunas veces te he de gritar
y puede que no pida perdón,
pero tú no me dejarás de amar
y mucho menos guardarás rencor.
Has soportado mi rebeldía
de noche y de día.
Puedo no atender tus consejos
pero nunca estas lejos.
El millón de ceros
a la izquierda de un cheque
no pagarán tus desvelos
ni tu vida inquietante.
Eres mí ser más preciado,
quien siempre estará a mi lado.
No importa dónde esté
siempre serás mi madre.
Eres pañuelo de lágrimas,
banco de 24 horas,
enfermera, maestra
y hasta adivina.
Mucho te amo
pero decirlo de frente no puedo.
Eres mí ser más preciado,
quien siempre estará a mi lado.